-Estos últimos meses he tenido los sueños más extravagantes. Sencillamente ridículos. (...) Es como yo si quisiera decirme algo a mí mismo. Algo que despierto no quiero oír.
-¿Ah, sí? ¿Y qué es?
-Que ya estoy muerto, aunque todavía vivo.
Ingmar Bergman (dir.)
Fresas salvajes, 1957
Fotograma de Fresas salvajes: Isak en la casa de verano.