jueves, 26 de junio de 2008

Los nombres de las horas.


Un día comprende 24 horas y se divide de diferentes formas. La más usual y generalizada es dividirlo entre día propiamente dicho, que comprende las horas en las que se puede disfrutar de luz solar, desde que sale el Sol hasta que se pone, y noche, que comprende las horas entre la puesta del Sol y la salida subsiguiente.

Las partes del día son tres: mañana, mediodía y tarde. Llamamos mañana a las horas comprendidas entre la salida del Sol hasta poco antes de que éste alcance su punto más alto, momento al que llamamos mediodía, pero, por extensión, también llamamos mediodía al tiempo que inmediatamente lo precede y sucede. Al mediodía le sigue la tarde, que acaba con la puesta de Sol, que da lugar al principio de la noche, que tiene siete partes: véspero es luego que tramonta el Sol. Le sigue el crepúsculo o lubricán, que es aquel tiempo entre que anochece y se hace noche cerrada, momento en que empieza el conticinio, las horas de silencio y quietud que dan lugar al intempesto o medianoche que comprende las horas centrales de la oscuridad, tiempo al que también llamamos concubio, por ser las horas en las que generalmente la gente duerme, que acabarán con el galicinio, cuando el gallo canta, al que seguirá el matutino, momentos antes de la aurora, que coincide con el amanecer, la salida del Sol y el comienzo de una nueva mañana.

Pint: Vilhelm Hammershøi
Interior con sol reflejado en el suelo