martes, 31 de diciembre de 2019

Desear ya es ceder


Desear ya es ceder. Se han levantado las barreras. No serviría de nada contenerse. ¿Para qué? Da igual. Ahora piensa como los opiómanos, los ludópatas. Está tan orgullosa de haber mantenido a raya la tentación unos cuantos días que se ha olvidado del peligro. Se pone de pie, levanta la manilla mugrienta, se abre la puerta.

Estación de Madeleine.

Leila Slimani
El jardín del ogro

Fot. Andrey Godyaykin 
Sitting