sábado, 8 de agosto de 2015

Manos



Cuando empiezan a morir los amigos,
cuando ya no está la casa de antes,
la que orientaba al sol
sus postigos y sus esquinas.

Cuando es distinta la calle en este invierno
y la humedad se instala
irremediablemente
en el amor, la piel,
la voz y las paredes.

Tanta niebla. en cada día que viene.

Es hora de buscar
unas manos que abriguen.
Las manos más calientes
aquí en medio del frío.
Las manos
que una vez existieron.


Rosario Troncoso
“Unas manos que abriguen”

Hands
Roo Panes